Diario de Sesiones 75, de fecha 10/4/2013
Punto 10
· 8L/PNL-0199 Proposición no de Ley del Grupo Parlamentario Popular, sobre incumplimiento del Estatuto de Autonomía.
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Pasamos al siguiente punto del orden del día, de proposiciones no de ley. Se ha indicado a esta Mesa que, por acuerdo de los portavoces, hay unanimidad o consenso en alterar el orden del día, en el sentido de que se vea en primer lugar la proposición no de ley 199, punto 3 del orden del día. Si es, del Grupo Parlamentario Popular, sobre incumplimiento del Estatuto de Autonomía (Asentimiento).
Pues comenzamos por esa proposición no de ley y para la defensa de la misma don Jorge Rodríguez, por tiempo de diez minutos, tiene usted la palabra.
El señor Rodríguez Pérez: Señor presidente. Señorías (Abandona su lugar en la Mesa el señor vicepresidente primero, Cruz Hernández. Ocupa la Presidencia el señor vicepresidente segundo, Fernández González).
El artículo 5 de nuestro Estatuto de Autonomía prescribe que los poderes públicos, en el marco de sus competencias, asumen como principios rectores de su política la promoción de las condiciones necesarias para el libre ejercicio de los derechos y libertades de los ciudadanos y la igualdad de los individuos y de los grupos en que se integran. También el apartado c) de este mismo artículo dice: "la consecución del pleno empleo y el desarrollo equilibrado entre las islas". Parece que Coalición Canaria y Partido Socialista renuncian a esos valores para excluir al Partido Popular, algo a nuestro juicio inverosímil porque ha sido el Partido Popular quien ha ganado las elecciones autonómicas y quien cuenta con el respaldo de la mayoría de los canarios.
Señorías, el debate del estado de la nacionalidad se celebra cada año en este Parlamento con cierta proximidad al día en el que conmemoramos, al Día de Canarias y, por consiguiente, la aprobación del mismo Estatuto de Autonomía, momento que a nuestro juicio debe servir para ver lo que hemos hecho y lo que nos queda todavía por hacer. Momento, además, para renovarnos en la ilusión de un futuro lleno de esperanza que podemos construir con lo que tenemos en nuestro Estatuto y en nuestra Constitución. Momento también para el examen, un buen momento para que el Gobierno reflexione sobre los errores que ha cometido.
El Estatuto de Autonomía, que se convirtió en 1982 en la esperanza de un pueblo deseoso de prosperidad, resulta que también, como contraparte, debería ser una obligación para mirar hacia atrás y ver qué se ha hecho durante todo este tiempo. Antes de gritar hacia afuera, señorías, hay que ver cómo se han hecho las cosas desde dentro. Esa es la obligación, a nuestro juicio, principal que tiene el Gobierno.
Nuestro Estatuto establece competencias autonómicas en agricultura, desarrollo rural, pesca, agua, educación, universidad, investigación, desarrollo, sanidad, vivienda, obras públicas, medio ambiente, servicios sociales, actividad económica, empleo, transportes, cultura y un largo etcétera de competencias.
Durante todos estos años se ha dispuesto -atención, señorías-, durante todos estos años se ha dispuesto de un presupuesto de muchísimo dinero público para hacer efectivas esas competencias y se han conseguido unos resultados muy lejos, por cierto, muy lejos, de los que se tenían que haber conseguido. ¿Se ha gastado bien ese dinero público? ¿Se ha gastado bien la cifra de ciento quince -atención-, 115.993.265.029 euros o, lo que es lo mismo, 12,5 billones de pesetas? ¿Se han ejercido de forma adecuada las competencias? La respuesta es que no.
El enorme volumen de fondos de que han dispuesto los gobiernos de Coalición Canaria y Partido Socialista, Partido Socialista y Coalición Canaria, en todas aquellas competencias, en todos aquellos órdenes, no ha eliminado el diferencial que hay en la desestructura entre Canarias, España y Europa. Es cierto que hemos avanzado -¡faltaría más!- pero no se han corregido en absoluto los problemas estructurales que tiene Canarias. Y lo más sangrante, por ejemplo, es que las políticas de empleo, las que más nos preocupan, han resultado un desastre.
¿De quién es la responsabilidad? Pues de quien tiene las políticas de empleo en sus manos, de quien puede ejercerlas, de quien tiene la capacidad de gobernar, que es quien tiene la obligación de reflexionar.
Señorías, hoy, cuando hay crisis económica, cuando hay muchísimo paro en nuestra comunidad autónoma, es cuando más se echan en falta esas reformas que tendrían que haber venido del Gobierno de Canarias desde hace mucho tiempo y que nunca vinieron.
Le proponemos al Gobierno, ausente hoy, con esta iniciativa un ejercicio, un ejercicio de reflexión, un ejercicio de reconocimiento de la realidad, que reconozca lo que no está funcionando y se afane en corregir los errores. Es el mayor homenaje que podríamos hacerles a los canarios (Rumores en la sala). Le proponemos al Gobierno y le decimos al Gobierno...
El señor vicepresidente segundo (Fernández González): Perdón, perdón, señor diputado.
Ruego silencio, señorías -doña Marisa, por favor-, están distrayendo al señor diputado en el uso de la palabra.
Continúe, señor diputado.
El señor Rodríguez Pérez: Le proponemos al Gobierno, o a los partidos y grupos parlamentarios que le apoyan, que a su vez se lo digan, ya que no están presentes, que se reconozca el fracaso, porque así ha sido en las políticas de empleo gestionadas por el Ejecutivo en estos últimos años. El resultado ya se sabe, 34% de paro, y de ese 34% nada menos que el 70% de desempleo juvenil.
Acordemos todos exigir una nueva forma de hacer las cosas, sobre todo en materia de empleo, con un programa de incentivos y de contratación y de planes urgentes de fomento de empleo para los jóvenes. Miren las medidas del Gobierno de Mariano Rajoy, mírenlas, estúdienlas, creo que son efectivas, en lugar de hacer tanta confrontación. Huyan de la confrontación y dedíquense a crear por Canarias.
Proponemos una profunda reforma también, señorías, en políticas educativas. ¿Por qué?, pues porque tenemos un muy alto índice de fracaso escolar. Hagamos reflexión sin sectarismos, sin ideologías trasnochadas, que de nada sirven, por cierto, a las futuras generaciones de canarios.
Hagamos de la sanidad pública una sanidad eficiente. Alejémosla del partidismo político. Recuperen a los verdaderos profesionales para que este servicio se ejerza con eficacia. Recuperemos también los aciertos, que los ha habido, por cierto, en materia sanitaria para hacer que los desaciertos, que los hay y muchísimos ahora, desaparezcan.
Reconozcamos aquí la realidad de los incumplimientos en política de vivienda; la competencia en justicia que recibimos en 1996 con tanta ilusión, pues, hay que ver cómo están hoy los juzgados. Y así podría seguir desgranando el estado de todas y cada una de las competencias para concluir en el rechazo que nos merece la gestión en políticas sociales, en las relaciones del Gobierno de Canarias con las administraciones locales, en las políticas que han dejado caer a los sectores productivos en Canarias.
Señorías, cada día es más evidente que en el peor momento posible Canarias tiene el peor gobierno posible. Han perdido ustedes la oportunidad de hacer reformas, frente a las 90 reformas que el Gobierno de Rajoy ha hecho hasta el día de hoy. Han perdido ustedes la oportunidad de hacer una Administración más eficiente, han perdido ustedes la oportunidad de mejorar la colaboración entre administraciones, han perdido ustedes la oportunidad del diálogo. Canarias necesita un gobierno dialogante. El Partido Popular les ha ofrecido cientos de propuestas, cientos de iniciativas desde el inicio de esta legislatura, fundamentalmente en materia de empleo y de incentivación económica, que ni siquiera han sido tenidas en cuenta por el Gobierno ni por los grupos parlamentarios que lo apoyan.
Hagamos que se cumpla el Estatuto, hagamos que el Gobierno de Canarias cumpla el Estatuto de Autonomía. Es urgente ponerse a trabajar más allá de la declaración de intenciones del discurso del presidente del Gobierno recientemente en el debate del estado de la nacionalidad.
Señorías, las políticas del Gobierno de Canarias son sinónimo de ineficacia, son sinónimo de paro y sus políticas son sinónimo de retroceso, no solo en Canarias sino también en toda Europa.
Termino ya. La proposición no de ley que les he presentado trata de impedir que el Gobierno de Canarias siga de vacaciones. Con esta proposición no de ley decimos al Gobierno que se ponga las pilas para luchar contra el paro, para mejorar la educación, para mejorar la sanidad, etcétera. Una proposición no de ley, en fin, que si sus señorías llegan a apoyar debería enrojecer al Gobierno y a su presidente, don Paulino Rivero.
No nos vamos a dejar, señorías, contagiar por el aburrimiento y la atonía del bipartito, porque tenemos las ideas, tenemos la ilusión y tenemos la coherencia para trabajar por el empleo. Den ilusión, den optimismo. Nosotros estamos en eso.
Nada más, señor presidente.
El señor vicepresidente segundo (Fernández González): Muchas gracias, señor diputado.
Se han presentado dos enmiendas: una de Coalición Canaria y otra del Grupo Mixto.
¿Por parte de Coalición Canaria quién va a intervenir? El señor Ruano.
El señor Ruano León: Muchas gracias, señor presidente. Señorías, buenas tardes.
Señor Rodrígue z, evidentemente no tendría, si se aprobara una proposición no de ley como esa, no tendría que sonrojarse, tendría que dimitir, porque es que la utilización de este tipo de iniciativas, la proposición no de ley, para establecer a través de ella una reprobación de carácter general no puede tener otro sentido. Lo único que podemos decir esta tarde es que quizás a usted no le tocó ningún papel por parte de su grupo en el debate, en el reciente debate de la nacionalidad, en relación con el mismo, con el contenido del mismo, y usted en este bis viene a pretender que esta Cámara tome posición en torno a un supuesto incumplimiento del Estatuto de Autonomía en relación con el rechazo que al parecer representa un conjunto de políticas que usted ordena, en esa serie de números de la proposición no de ley, respecto a la labor que está haciendo el Gobierno de Canarias hasta este momento.
A mí me gusta, y lo intento, intento darle a las posiciones que adopto en este Parlamento la seriedad, la responsabilidad, el mensaje que realmente la ciudadanía debe o espera tener de nosotros, cada uno en la posición política que tiene. En fin, somos opciones políticas distintas, concurrimos a unas elecciones, obtenemos determinada representación y con arreglo a la misma defendemos nuestra posición en esta Cámara, pero lo que sí debemos hacer, lo que sí que tenemos es la responsabilidad de intentar decir la verdad a la ciudadanía; intentar decir la verdad, intentar enmarcar el conjunto de respuestas posibles, respuestas posibles, que tenemos en este momento hacia los ciudadanos y a las ciudadanas de Canarias, porque yo creo que esa es la misión para la que estamos aquí.
Y por eso, si me permite, rememoro algunas cuestiones que tocamos hace escasamente 15 días cuando hablábamos aquí en el debate de la nacionalidad y cuando yo le respondí a la portavoz popular entonces aquella frase de la campaña norteamericana de Clinton, Bush padre, en el año 92, en la cual le decía "¡es la economía, estúpido!". Porque usted habla del empleo y ha dicho una cosa que sabe usted perfectamente que no se corresponde con la realidad. Sabe perfectamente que el empleo depende del funcionamiento de la economía. Por tanto, hablar de políticas de empleo... En fin, si quiere hablamos de eso, de un plan de empleo especial, algún plan de empleo social como aprobamos hace unos 15 días, pero eso no va a cambiar la situación en una sociedad de casi 2.200.000 habitantes. No la va a cambiar. ¿Pero por qué?, porque resulta que esta sociedad, en fin, esta comunidad autónoma, depende de un Estado. Ese Estado resulta que cuando llegó el presidente del Gobierno actual dijo que iba a solucionar el desempleo y próximamente cumpliremos casi 6 millones de parados, ha subido un millón en escasamente algo más de un año.
Por tanto, si yo utilizara la misma técnica, podría decirle, podría ir a la Constitución y darles lectura a algunos artículos de la Constitución, y decir: "el Gobierno de España incumple la Constitución". Podría decirle: "Artículo 35, todos los españoles tienen el deber de trabajar y el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, sin que en ningún caso pueda producirse discriminación", etcétera, etcétera. O podría darles lectura a algunos artículos que tienen que ver con la autonomía financiera de las comunidades autónomas: "Las comunidades autónomas -artículo 156.1- gozarán de autonomía financiera para el desarrollo y ejecución de sus competencias con arreglo a los principios de coordinación con la hacienda estatal y de solidaridad entre todos los españoles". O podría decirle, por ejemplo, el 158.2: "Con el fin de corregir desequilibrios económicos interterritoriales y hacer efectivo el principio de solidaridad, se constituirá un fondo de compensación con destino a gastos de inversión, cuyos recursos serán distribuidos por las Cortes Generales entre las comunidades autónomas y provincias, en su caso". Señor Rodríguez, el planteamiento, el planteamiento equivalente sería decir que es que el Gobierno de España incumple la Constitución.
En fin, tenemos muchísimas cosas que hacer y realmente ustedes tienen la legitimidad de hacer propuestas, como vienen haciendo en una sucesión de plenos y de comisiones, propuestas algunas sobre aspectos sanitarios, otras en aspectos de bienestar social, empleo, en fin, pero hacer una proclama general, como usted pretende hoy, es hacer un debate general que no corresponde en este momento. Y además una agravante de esa proclama general es que lo hicieron ustedes, la presentación de esta proposición no de ley, la hicieron ustedes en medio de una negociación donde supuestamente querían llegar a acuerdos con el Gobierno de Canarias. Yo no entiendo muy bien, si realmente tenían ustedes voluntad de llegar a esos acuerdos, cómo pudo producirse simultáneamente, en ese lapso de tiempo en donde todavía las negociaciones no estaban rotas, la presentación de esta proposición no de ley, que es una reprobación, punto por punto, porque es que rechaza, rechaza, rechaza, rechaza... Es así, está redactado de esa manera. Es decir, no hay una sola valoración positiva. Y, bueno, y por otra parte no quiero entrar, si hiciera el alegato en relación con cada uno de los ámbitos sectoriales podría también responderle y hablar de justicia y hablar de... En fin, y podría plantearle temas de cómo se está comportando la justicia desde el punto de vista de la planificación estatal, podría hablar de la economía en general...
En fin, señor Rodríguez, usted sabe perfectamente -lo dije en el anterior debate de la nacionalidad también- que estamos en una grave depresión económica, con unas políticas que, en fin, no nos queda más remedio que ejecutar.
Pero es que ya, me permite usted, lo digo desde el punto de vista del respeto personal pero ridículo político, desde el punto de vista del ridículo político, es decir, "el Parlamento de Canarias, dada -el número 10-, dada la falta de apoyo a los sectores productivos canarios por los recortes presupuestarios y el impago reiterado de sus obligaciones con estos, entre otros motivos, rechaza las políticas desarrolladas en materia económica...". Es decir, usted habla de recortes presupuestarios, pero es que resulta realmente con una falta de rigor de un extremo insostenible.
Señor Rodríguez, nos hemos puesto de acuerdo en muchas ocasiones en algunas cosas importantes para Canarias. Desgraciadamente no parece que se esté dando el escenario, en función de cómo se produjo el último debate de la nacionalidad, para producir el consenso. Que yo decía entonces que requiere, entre otras cuestiones, una actitud de diálogo, de espetar a la otra parte de manera correcta, con respeto, con el respeto entre dos partes, para poder llegar a acuerdos sobre algunas cosas. Y hemos llegado a acuerdos, por ejemplo, en el tema del Régimen Económico y Fiscal, en el cual usted en su momento, en la resolución del mes de julio pasado, fue ponente por parte de su grupo.
¿Qué hemos hecho? Nosotros hemos presentado una proposición no de ley en relación con instrumentos, instrumentos de modificación del Estatuto de Autonomía de Canarias, que podrían servir, servir sin duda alguna, a la mejora de la actividad económica en cuanto se produzca una mejora, si realmente se produce, de la economía en España y en el conjunto de la eurozona. Y en ese contexto hemos hecho nuestra enmienda. Nuestra enmienda es evidentemente una enmienda de sustitución, porque es imposible plantear cualquier tipo de acercamiento a un planteamiento corrosivo como el que se realiza a través de su proposición no de ley.
Nosotros, señor Rodríguez, esperamos que, en fin, que este debate sirva para que pensemos en que, a través de esa modificación, hay herramientas posibles para mejorar en lo económico. Creemos que se pierde una oportunidad, con estas iniciativas de impulso político, de hacer realmente un planteamiento de impulso frente a un mero planteamiento de rechazo, que es el que usted realiza. Por otra parte, sabe usted que el Estatuto en ese plano, en el plano que proponemos nosotros, puede constituir una oportunidad para ese desarrollo económico. Y por desgracia hoy estamos con la noticia de que Bruselas lanzará un aviso a España por graves riesgos económicos y específicamente lo que más preocupa al ejecutivo comunitario -dice la noticia- es el continuo incremento del paro, cuya tasa media en los últimos tres años ya está... en fin, en umbrales absolutamente desconocidos y, por tanto, con una incapacidad real de que el Estado español en este momento pueda propiciar hacia las comunidades autónomas los niveles de riqueza necesarios para que produzcamos bienestar y específicamente empleo en el marco del bienestar y de la paridad social que necesitamos todos los europeos.
Muchas gracias, señor presidente.
El señor vicepresidente segundo (Fernández González): Muchas gracias, señor diputado.
Por parte del Grupo Mixto, tiene otra enmienda, el señor Román.
El señor Rodríguez Rodríguez: Señorías, buenas tardes.
Vamos a ver, en política caben muchas cosas y casi todo, si se hace con buenas formas y con respeto a la ley, pues, cabe, pero, hombre, yo creo que este no es el mejor instrumento para... No cuestionar al Gobierno, en esta PNL el Partido Popular hace una censura de las instituciones, del autogobierno, de lo que ha representado la estructuración de Canarias a través de este Parlamento y de un Gobierno que de aquí sale.
Y yo creo que despacharse semejante asunto en 12 puntos es realmente arriesgado. Primero porque la censura no sería al Gobierno de turno, que eso siempre es legítimo y especialmente si se tienen argumentos, sino que aquí se censura nuestra estructura, nuestras instituciones, el autogobierno; en definitiva, la democracia. Porque si hay dos ingredientes que nos han permitido avanzar -aunque menos de lo que quisiéramos y de lo que nos merecemos- son el sistema democrático y la nueva estructuración del Estado que se derivó de la Constitución del 78, yo creo que inacabado, incompleto, porque las circunstancias del momento histórico aquel obligaron a pactos y a cesiones que no necesariamente se tienen que mantener 30 años después, no necesariamente porque las circunstancias del contexto cambian. Despacharse con una crítica generalizada y con una casi descalificación a la estructura institucional de nuestra comunidad a mí no me parece justo. Además de suponer una autocensura, porque en este proceso de autogobierno el Partido Popular ha tenido notables y relevantes responsabilidades de gobierno. Yo no he calculado porque no dedico tiempo a eso, pero como mínimo la mitad del tiempo, como mínimo, y más, 20 años. Entonces yo no creo que este sea el procedimiento para discutir de forma tan categórica lo que representan las instituciones, los cambios, los avances de la sociedad canaria en estos 30 años.
Lo que sí me parece oportuno, y no con este formato, es que debiéramos hacer un alto, la sociedad canaria y sus instituciones, los partidos políticos, para reflexionar, no sobre lo que pase en un año, sino lo que ha pasado en los 30 años de autogobierno. Y había un pretexto extraordinario, que fue el cumplimiento de los 30 años de nuestro primer Estatuto, que, por cierto, pasó sin pena ni gloria. Por cierto, los 20 años sí que pasaron con un poquito de gloria y menos pena, pero los 30 pasaron sin pena ni gloria, que era una excelente oportunidad para estas cosas, para la reflexión global.
Yo sí que creo que hemos avanzado en democracia, aunque esta democracia es imperfecta y aquí podíamos echar una mano en su mejora, yo creo que hemos avanzado en libertades, hemos avanzado en derechos sociales, en servicios básicos, en infraestructuras de manera notabilísima, la mejora de una estructura empresarial propia, el desarrollo del sector turístico todavía inacabado y con problemas estructurales. Y luego hay cosas que no hemos hecho bien. En eso yo desde luego... yo asumo la parte que me corresponda. Hay cosas que no hemos hecho bien, no todo lo que nos pasa es culpa de otros. Esa simplificación que hacen algunos de endosar todas las culpas de lo que le pasa a la sociedad canaria al gobierno de turno de Madrid yo no la hago, nunca lo he hecho, porque me parece que es un mal diagnóstico. Hay asuntos que hemos hecho mal nosotros, nosotros. En materia de gestión del territorio, hemos tenido amplias y potentes competencias. Exceptuando en costas, todo lo demás ha dependido en gran medida del autogobierno. Y ahí los aciertos y los errores son de las instituciones canarias, son de los representantes de este pueblo, y hay ahí cuestiones francamente mejorables. En materia de energías renovables no hemos avanzado porque no hemos hecho las cosas bien, esencialmente nosotros. Yo reprocho al Gobierno de Rajoy el decreto de enero de 2012, que nos metiera en el mismo saco de las renovables continentales, pero no simplifico y digo que los problemas de las renovables empezaron en enero del 2012, porque no es verdad (Se reincorpora a la Mesa el señor vicepresidente primero, Cruz Hernández, y pasa a ocupar la Presidencia).
De manera que sí es bueno que las instituciones, que los responsables, que los gobiernos, que los partidos de Canarias hiciéramos un día un alto para reflexionar sobre qué ha acontecido en 30 años en esta tierra, en qué hemos avanzado, qué responsabilidades se tiene en problemas estructurales que tiene esta tierra, cuáles están condicionados por nuestro tamaño, por nuestra lejanía, por nuestra formación, por nuestros problemas históricos y cuánto se puede endosar con argumentos al olvido, al maltrato, a la falta de sensibilidad, al reconocimiento de los hechos diferenciales canarios. A mí ese debate me parece oportuno y necesario, no de esta manera ni por este procedimiento, primero porque no es el formato, porque se cometen notables injusticias, pero yo sí que creo que tocaría en este momento de encrucijada histórica de Canarias reflexionar sobre estos 30 años de democracia y de autogobierno, de avance y de estancamiento, de frustraciones, de cosas bien hechas y de cosas mal hechas, de olvidos, de estilos, de calidad democrática, de orientación de determinados sectores de nuestra economía, del papel de nuestros partidos, de la calidad de nuestra democracia. A mí ese debate me parece necesario y, aunque igual no lo pretendía, yo creo que de eso, me sugirió cuando leía el tema, valía la pena discutir.
Evidentemente, si de lo que se trata es, como creo que se trasluce del texto, de cuestionar el modelo de autogobierno, el modelo de convivencia, en definitiva, que hemos ido construyendo a trancas y barrancas, con aciertos y errores, nosotros estamos radicalmente en contra. No solamente no cuestionamos los niveles de autogobierno que hemos conquistado sino que nos parecen claramente insuficientes, claramente insuficientes. Y por eso, y no para rellenar, dijimos que, frente al cuestionamiento del actual marco estatutario, que no quiere decir aprobación de las políticas vigentes, del marco estatutario, nosotros creemos que hay que renovar el marco estatutario, para ampliarlo, para blindar nuestro Régimen Económico y Fiscal, para recuperar o conquistar determinadas competencias que es razonable que estén en nuestras manos, para que en algunas estrategias absolutamente decisivas para el futuro las autoridades locales puedan participar.
Nosotros creemos que más autogobierno puede ser más progreso, puede ser más democracia. Es verdad que cabe la posibilidad de que los ciudadanos elijan gobiernos que luego no hagan la gestión debida o la gestión mejor posible, esto es posible, pero esto forma parte de la lógica de la democracia. A mí no me gusta el Gobierno de España, pero también no tengo ninguna duda de que han ganado las elecciones, que tienen 186 diputados y que seguramente los que dirigen ese Gobierno intentan hacerlo bien. Quiero decirles con ello que nosotros defendemos no solamente este marco estatutario sino que nos parece poco, nos parece insuficiente, y en el marco de las reglas, en el marco de las reglas, debiéramos avanzar, avanzar en un nuevo marco, un nuevo estatuto político de Canarias en el marco del Estado español y de la Unión Europea. E insisto y repito por segunda vez aquí que el trabajo de la anterior legislatura en esta materia me parece un buen punto de partida.
De manera que nosotros, frente a esa crítica generalizada a todo lo que ha representado el autogobierno, que, insisto, no solamente sería al Gobierno de turno sino a la historia reciente de Canarias, me parece desproporcionada, injusta, con algunos toques demagógicos y con bastantes contradicciones e incoherencias por la historia que conocemos. Y en cualquier caso, porque se trataba de recoger este debate, sí que me parecería oportuno, no sé qué formato debiera ser, pero sería bueno que 30 años después de este modelo de organización política e institucional, de estos niveles de autogobierno y en esta encrucijada, que en Canarias hiciéramos una reflexión rigurosa, seria, sobre lo que nos pasa y cuánto de lo que nos pasa pudo evitarse con mejores gobiernos y cuánto de lo que nos pasa tiene mucho que ver con el olvido, con la falta de sensibilidad, con el reconocimiento de elementos diferenciales y condicionantes que tiene Canarias y que de esa reflexión colectiva, de esa reflexión colectiva salieran nuevas estrategias y nuevos compromisos. Y desde luego, no tengo duda, en una reflexión tranquila y rigurosa, una de las estrategias tendría que ser profundizar en el autogobierno, porque es así en lo que han concluido yo creo que todas las comunidades autónomas que han accedido a nuevos estatutos de autonomía, y las hay de todos los colores, de todos los colores, hace, pues, una legislatura y media.
Acabo diciendo que la enmienda que proponemos, de sustitución en el sentido de que reafirmamos la necesidad del autogobierno como el elemento de progreso importante en estos 30 años. No podemos aceptar, digamos, la descalificación o el cuestionamiento de todo lo que aquí ha pasado, aunque algunas cosas son responsabilidades nuestras. Nosotros no aceptamos esa lógica, insisto, de que todo lo que nos pasa es culpa de otro. Aquí ha habido errores garrafales y sigue habiendo errores garrafales. Aquí hay cosas que se podían haber hecho de otra manera...
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Sí, señor diputado, tiene usted un minuto para concluir.
El señor Rodríguez Rodríguez: Hay que ser autocrítico y en eso, desde luego, en nuestro grupo va a encontrar el aliado. No nos podemos conformar ni con lo que tenemos de autogobierno pero tampoco con lo que hacemos desde las instituciones de Canarias. Los que tenemos ya una cierta trayectoria política sabemos que se pueden hacer las cosas mejor, que se pueden alcanzar mejores niveles de profesionalización, que hay que buscar nuevos estilos para relacionarnos entre nosotros y que hay cosas que son razonables aunque las diga el PP que hay que apoyarlas, y que hay cosas que son razonables aunque las diga Coalición Canaria que hay que apoyarlas, y así sucesivamente. En eso todavía tenemos mucho tránsito, mucho que hacer.
Yo espero que este debate, que va a quedarse aquí, pudiera servir para lo otro que he planteado: la necesidad de esa reflexión colectiva sobre estos 30 años y la necesidad de reorientar algunos asuntos cara al futuro de esta tierra.
Muchísimas gracias.
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Gracias, señor diputado.
Por parte del grupo proponente de la proposición no de ley, para fijar posición en relación a lo mismo, don Jorge Rodríguez, desde el escaño, y por tiempo de cinco minutos tiene usted la palabra.
El señor Rodríguez Pérez (Desde su escaño): Gracias, señor presidente.
Antes de que el presidente me llame la atención, quiero que las primeras palabras sean para posicionarme en relación con las dos enmiendas. Evidentemente el Grupo Parlamentario Popular las rechaza, y las rechaza de plano. Nada tienen que ver las enmiendas presentadas con la esencia nuclear de la proposición no de ley formulada por el Grupo Parlamentario Popular.
Pero algo más debo decir. Tanto cree el Partido Popular en el autogobierno que fue precisamente el Partido Popular, cuando gobernó de 1996 a 2003 en España, que hizo de nuestro Estado el Estado más descentralizado del mundo, del mundo. Por consiguiente, criticarnos a nosotros como contrarios al autogobierno o criticar, como se nos ha dicho por parte del representante del Grupo Mixto y por parte del Grupo Parlamentario Nacionalista, que no creemos en el autogobierno o que lo criticamos nos resulta, de verdad, una falacia.
Quiero decir que nuestra proposición no de ley fue presentada a este Parlamento ya en las postrimerías del momento en que teníamos que recibir por parte de los grupos que gobiernan un asentimiento o una negativa a las propuestas que el Partido Popular había hecho en las mesas que se habían conformado al efecto de llegar a un acuerdo. Estábamos convencidos ya, a esas alturas, de que el acuerdo no iba a ser posible. ¿Y sabe usted por qué?, porque nos tienen acostumbrados, tanto el Grupo Parlamentario Socialista, Partido Socialista, como Coalición Canaria, a no fiarnos ni de uno ni de otro. No nos fiamos en absoluto, no confiamos en ustedes en absoluto. Ustedes no gobiernan, ustedes tan solo ocupan el poder, y con eso lo he dicho todo.
Muchas gracias.
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Gracias, señor diputado.
Para fijar posición en relación a la proposición no de ley, que es evidente que ha sido rechazada, por parte del Grupo Parlamentario Socialista, don Manuel Fajardo, por tiempo de cinco minutos tiene usted la palabra.
El señor Fajardo Palarea: Buenas tardes, señorías.
Bueno, nos acabamos de enterar hoy, por las palabras dichas por el señor Rodríguez, que lo que se dijo en rueda de prensa, lo que dijo en la rueda de prensa a todos los medios de comunicación no era cierto. Acaba de reconocerse hoy que "en las postrimerías del acuerdo y cuando ya no confiábamos en el mismo" y, sin embargo, en rueda de prensa se dijo que el acuerdo se había cerrado el 28 de febrero. ¡Qué curioso! Y eso dicho a todos los medios de comunicación en rueda de prensa. "Esta es la PNL de la concordia, como la denomino yo, PNL que demuestra que efectivamente había voluntad de acuerdo".
Mire, casi principia la proposición no de ley signando "el enorme volumen de fondos de que han dispuesto los gobiernos de Coalición Canaria, en todos los órdenes, no ha permitido eliminar el diferencial con el resto de autonomías ni con Europa". Sigue explicitando la proposición no de ley: "Es cierto que hemos avanzado -¡hasta feo estaría!- pero los gobiernos de Coalición Canaria y, más recientemente, de Coalición Canaria y el Partido Socialista ni han corregido los problemas estructurales de Canarias ni han sido capaces de llevar a cabo un modelo de desarrollo que garantice el bienestar de los canarios". Y en este punto, señor Rodríguez, tengo que hacer una primera parada, para denunciar el hecho del intento del grupo proponente de borrar de la memoria histórica de esta comunidad, de forma interesada y torpe, los años que han gobernado en Canarias. Señor Rodríguez, son los periodos que van del 95 al 99, del 99 al 2003, del 2003 al 2005, del 2007 al 2010. Y de esconder u omitir, no sé por qué, que doña María Eugenia Márquez Rodríguez, don Eduardo Jordán Martinón, don Francisco de la Barreda Pérez, don Ignacio González Santiago, don Rafael de León Expósito, don Gabriel Mato Adrover, don Alfredo Vigara Murillo, don Lorenzo Suárez Alonso, don Tomás Van de Walle Sotomayor, don Guillermo Guigou Suárez, doña María Australia Navarro de Paz, don Luis Soria López, doña Águeda Montelongo González, don José Manuel Soria López, doña María del Pilar Merino Troncoso, doña María Mercedes Roldós Caballero y doña Rita Martín han formado parte de gobiernos que han gobernado esta comunidad. Y se pregunta el proponente: "¿qué han hecho con los 115.000 millones de euros que han gestionado?", pregúntenselo ustedes. ¡Pero si ustedes son los que han gobernado! ¡Esta PNL es un autorretrato de ustedes! ¿Pero cómo es posible que ustedes nos traigan una PNL sin asumir ningún tipo de responsabilidad de lo que ha pasado en esta comunidad y echando las culpas a Coalición Canaria y ahora recientemente al Partido Socialista? Yo, sinceramente, no lo entiendo, porque, siguiendo sus palabras, a todos sus compañeros resulta que habría que aplicarlo: que ni han sabido corregir los problemas estructurales de Canarias ni han sabido llevar a cabo un modelo de desarrollo que garantice el bienestar de los canarios.
Pero es que no acaba aquí, señorías, no acaba aquí la interesada y falsa interpretación de la reciente historia política de esta comunidad. El proponente grupo termina su exposición de motivos achacando al actual grupo de gobierno que el mismo es una reiteración de los errores de siempre. Pues de los suyos, que han estado gobernando durante muchísimos años, si aplicáramos su misma terminología. De los suyos. Y además dice, ¿y cuáles son estos, según ellos?: el empecinamiento en el camino equivocado para la recuperación económica -suyo-, la creación de empleo -suyo- y la sostenibilidad del Estado del bienestar en Canarias. Es decir, vuelvo a repetir, el autorretrato.
Bien. Decía el señor Rodríguez... Mire, legitimidad desde el punto de vista jurídico la tienen, pero legitimidad -y que me entienda bien el grupo proponente- entendida como reconocimiento de autoridad de quien lo pronuncia, ustedes no tienen ninguna para presentar esta PNL. Les voy a explicar. Porque no la tienen quienes rechazan las políticas de empleo y formación de este Gobierno y a su vez han impuesto una reforma laboral que abarata el despido y destruye empleo; quienes engañaron a millones de españoles prometiéndoles que acabarían con el paro sacándose una foto en una cola del paro y no lo han hecho. Porque no la tienen quienes rechazan las políticas educativas de este Gobierno, hombre, después de subir, después de subir las matrículas, bajar las becas, primero la educación privada sobre la pública, cobrar por los comedores escolares e intentar imponer una reforma educativa que ya ha dado lugar al anuncio de hoy para una huelga general en educación a nivel estatal. Porque no la tienen quienes rechazan las políticas de sanidad de este Gobierno cuando han hecho un recorte en sanidad tremendo, privatizan hospitales, demonizan a los médicos y a los enfermeros que se manifiestan por toda España, que implantan el copago o cierran los consultorios de noche dejando desamparados a muchísimos españoles. ¡No la tienen, no la tienen, no la tienen! Y porque son capaces de utilizar la muerte de una persona para intentar sacar rédito político. ¡No la tienen, no la tienen, no la tienen! (Aplausos y rumores en la sala.)
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Señorías, señorías, por favor, guarden silencio. Cuando termine el portavoz, le daré la palabra (La señora Navarro de Paz solicita el uso de la palabra).
Señorías, guarden silencio, por favor.
El señor Fajardo Palarea: Porque no la tienen en otro sentido.
Les voy a hablar solamente de una cosita, para terminar...
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Concluya, señor diputado.
El señor Fajardo Palarea: Sí, sí, para terminar contra la legitimidad. Hablan de la pluralidad en la información. El Consejo de Europa, preocupado por la presión política en televisión... ¿Saben que después de que ustedes están en Televisión Española nos han metido en 19, en el punto 19 de esta resolución se incluye a Televisión Española en un listado de operadores públicos...?
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Gracias, señor diputado.
Doña María Australia, ¿a qué efectos?
La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Para pedir la palabra dado que por parte del portavoz que ha estado interviniendo hasta este momento se ha hecho una alusión ofensiva, grave, respecto a mi grupo parlamentario y quiero exigirle que la retire y que nos pida, excusas no, perdón aquí, porque nos ha ofendido de manera tremenda.
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Gracias, señora diputada.
¿Entiendo que ha hecho la intervención o quiere hacer alguna otra intervención en relación a ese asunto?
La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): No, solamente quiero hacer esa petición.
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Gracias, señora diputada.
El señor portavoz del Grupo Socialista. ¿No desea intervenir? (El señor diputado señala que no va a intervenir.)
La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Bien, señor presidente, que conste en acta y nos reservamos las acciones pertinentes.
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Gracias, señora diputada.
La señora Navarro de Paz (Desde su escaño): Porque es gravísimo lo que ha dicho (Rumores en la sala).
El señor vicepresidente primero (Cruz Hernández): Señorías, señorías, por favor, guarden silencio, por favor.
Señorías, por favor, guarden silencio.
Procedemos a la votación de la proposición no de ley del Grupo Parlamentario Popular, sobre incumplimiento del Estatuto de Autonomía, donde no se ha admitido ninguna de las dos enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios y, por lo tanto, se vota el texto tal como fue presentado por el grupo proponente, el Grupo Popular (Rumores en la sala).
Señorías, guarden silencio, por favor. Comienza la votación (Pausa).
Queda rechazada la proposición no de ley con 19 votos a favor, 27 en contra y ninguna abstención.